El ser humano es un conjunto cuerpo-mente que no podemos separar de forma dual.

Los enormes avances en la ciencia , la tecnología y la inteligencia artificial no han ido parejos con aquellos que nos enfrentan a las vicisitudes y contingencias de la vida. Sufrimos problemas y nos enredamos en conflictos emocionales y de conducta que nos repercuten en la expresión de enfermedades en relación al estrés. Todos somos conscientes de la estrecha relación entre cuerpo material y físico, emocional y energético, mental e incluso transpersonal.

Muchos de los síntomas que relacionamos con el cuerpo físico proceden de desequilibrios emocionales y mentales y viceversa. Es labor del profesional identificar dónde reside el origen del problema para conducirlo de la manera más adecuada.

Técnicas y filosofías de origen oriental como el yoga,  el mindfulness y otras técnicas y filosofías occidentales, pilates, autoconocimiento, psicología, psiquiatría, se aúnan para corregir los desequilibrios emocionales que afectan a la salud.

La mujer es un todo holístico que merece todo nuestro respeto y consideración. Nada queda al margen de nuestra ayuda y  posible colaboración para aspirar a la felicidad y al bienestar.